Hispania fue dividida en un principio en dos provincias: España Citerior (la más cercana geográficamente a Roma, que comprendía el este y noreste peninsulares) e España Ulterior (la más alejada de la metrópoli). Durante doscientos años no se cambió, excepto en los límites geográficos, acrecentados por las conquistas (correspondiendo el centro y norte a la primera y el oeste y noroeste a la segunda). Sin embargo, Augusto en el 27 a.C. dividió la Ulterior en dos nuevas provincias (Lusitania y Bética) y llamó Tarraconense a la Citerior.
Por último, Hispania fue dividida en seis provincias: Tarraconense, Bética, Lusitania, Gallaecia, Cartaginense y Baleárica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario